Cultura Impopular

El blog de Espop Ediciones

domingo 30 de mayo de 2010

Capturando una portada

Creo que de todas las portadas que hemos hecho hasta ahora en Es Pop, la de Capturado ha resultado ser la más complicada. Al contrario que en anteriores ocasiones, no contábamos con un concepto demasiado concreto para la imagen principal, sino que ésta surgió en el transcurso de una serie de correos que fui intercambiando con Kano, el ilustrador de la misma, al cual quiero agradecer antes que nada el entusiasmo y la entrega con los que afrontó todo el proceso. Kano es dibujante de cómics y ha trabajado para las dos principales editoriales norteamericanas del medio, Marvel y DC, en colecciones como Superman: Action Comics, H-E-R-O, Gotham Central y Marvel Zombies, aunque quizá al gran público le suene más su labor en campañas publicitarias para empresas como Movistar, Mitsubishi o el Masters de tenis de Madrid (podéis ver imágenes de todas ellas aquí). Kano, en cualquier caso, es un tipo muy versátil que se maneja en varios estilos distintos, y a mí lo que más me había llamado la atención en este caso había sido una serie de dibujos que realizó para ilustrar Frío, un proyecto de guión de nuestro común amigo David Muñoz.

Izquierda: la portada original. Derecha: ilustración de Kano para Frío. Pincha para ampliar.


El estilo y la atmósfera de esta imagen que podéis ver aquí arriba me parecieron idóneos para la prosa tersa y directa de Neil Cross y, de hecho, con apenas un par de modificaciones, habría resultado casi perfecta para la cubierta de su anterior novela, Buried, de la cual ya hablaremos en el futuro. Volviendo a Capturado, he aquí un par de extractos del primer correo que le envié a Kano, obviando algunos spoilers:

«Para la imagen de portada se me han ocurrido varias opciones, a ver cuál te parece más interesante. Una deriva directamente de la ilustración que hiciste para el guión de David. Sería mostrar una carretera comarcal típicamente inglesa, rodeada de árboles, con una VW Combi naranja aparcada en la cuneta y un tipo metiendo a otro tío inconsciente y golpeado por la puerta lateral de la furgoneta. Lo ideal sería que no se les viera apenas las caras. De hecho, ni siquiera debería verse muy a las claras que es un tío arrastrando a otro hasta que uno se fija un poco. Quiero decir, que a lo mejor el raptado podría estar asomando de la puerta de la furgoneta, pero en un ángulo que no sea normal, por ejemplo tirado de espaldas en la calle, con las piernas desapareciendo en el interior, no sé. Te pego una imagen de referencia de la VW Combi».

«Hay una escena en el libro en que la furgoneta queda abandonada justo al borde de una playa. Es una imagen que me mola, pero al margen de dibujarla con las puertas abiertas… no se me ocurre otro modo de transmitir una sensación un poco de inquietud o de ausencia, algo que enlace con los otros temas del libro. Pero ahí te dejo la idea por si se te ocurre algo por ese lado. Lo más importante aquí sería, al igual que con lo de la VW aparcada a un lado de la carretera, conseguir transmitir una sensación de inquietud a partir de una imagen en apariencia banal. El otro concepto más o menos claro que tengo para la imagen de portada iría por otro camino completamente distinto. Sería una imagen de un cuarto vacío, con una ventana en medio como única fuente de luz, y frente a la ventana, con la luz de ésta reflejada en el suelo, una silla con un tipo atado (inmovilizado con bridas a los brazos y las patas de la silla). Una vez más, lo mejor es que el tipo esté medio en sombras, que se sugiera el encierro más que otra cosa. La imagen me vino pensando en los viejos tebeos de Spirit y su casa en el cementerio con la gran ventana por detrás. Evidentemente, en este caso la ventana no sería tan espectacular, sino algo mucho más normalito. Te pego un garabato para que te hagas una idea más concreta de a lo que me refiero».

«Estoy pensando ahora mismo, de hecho, que cuanto más sugerido quede el tema mejor va a funcionar, probablemente, como portada. Quizá lo más efectivo sería centrarnos en la silla, incluso vacía, pero insinuando que ahí ha habido alguien atado. Podría estar manchada, con los restos de las bridas todavía colgando, un cubo con heces volcado al lado… el estado en el que quedaría la habitación una vez desaparecido el «capturado» del título, vamos. También hay otra escena en el libro en la que dos personajes se pelean a la orilla de un torrente y quedan pringados de barro de arriba abajo. Ilustrar eso probablemente iba a quedar demasiado literal, pero la escena hizo que me acordara de esta foto, que me parece muy sugerente y malrollera».

A la izquierda, «Massimo Speech», fotografía de Davide Faggiano. A la derecha,
ilustración de Tobias Kwan. Pincha para ampliar.


«Otra referencia podría ser esta ilustración de Tobias Kwan que he visto hace un rato en tumblr (una feliz coincidencia, desde luego). Evidentemente, no es aplicable a Capturado. Pero ¿y si en vez del payaso tuviéramos a nuestro protagonista cubierto de barro, hojas secas y demás detritus vegetales, y en vez de una pìstola llevara en la mano el pie de cabra, como si estuviera golpeando algo o a alguien que queda fuera de la portada y al que nosotros no vemos? ¡Ahí lo dejo! Mientras, para la contraportada también tengo dos imágenes, estas sí mucho más concretas. Una, la que más me atrae, es un banco de herramientas. Bueno, en realidad no un banco, sino una tabla en vertical de la que cuelgan diversas herramientas amenazadoras: un pie de cabra o alzaprima, una almádena, unas tijeras de podar, un martillo de carpintero de esos con cuña para arrancar clavos… Toda la contra de arriba abajo podría ser el corcho o la plancha que va colgada en la pared y en la parte inferior podría verse apenas un par de centímetros de lo que es ya el banco en sí, y sobre el banco un rollo de cinta de embalar y (¡agh!) un diente arrancado. Lo que te decía de combinar la imagen costumbrista con el mal rollo. La otra idea, que podría encajar además bastante bien con la imagen de la furgoneta abandonada en la playa si finalmente nos decidiéramos por esa opción, es la de un pier ardiendo. La novela relata un incendio real en el Grand Pier de Weston-super-Mare, en Inglaterra, y la imagen de esa pasarela internándose en el mar, y un pequeño incendio al fondo, me parece bastante cautivadora, sobre todo si la ilustración sólo ocupa el tercio inferior de la contra y el resto queda ocupado por el aire, como hizo Henry Sene Yee en su portada para Columbine (la VW en la playa podría seguir el mismo esquema). El Grand Pier de Weston era éste».

Y hasta aquí llegaba el exhaustivo primer pitch, que he resumido en parte para no aburrir hasta a las ovejas, acompañado de una galerada de la novela para que Kano pudiera leerla y aportar cualquier otra idea que le sugiriera el texto. A continuación os pego varios fragmentos de sus respuestas, acompañados de los primeros bocetos que me fue enviando.

Primeros bocetos y primera visualización de la «pelea en el río». Pincha para ampliar.


Kano: «Todas me parecen sugerentes. Voy pensando en voz alta… La primera es la más clara, igual demasiado peliculera. La furgo mola en todas. En la playa, descontextualizada, inquieta, quizás sea una imagen más abstracta. Que termine resultando perturbadora ya es más difícil de resolver, al menos para mí, que me manejo mejor con lo obvio que con ese tipo de fría sutilidad. La de la ventana mucho mejor con la silla vacía. Me hace gracia, porque es la típica imagen de terapia gestalt, ésta igual da más idea de tortura, más mal rollo que inquietud. Lo del barro me parece guapísimo visualmente. A mí siempre me tiran más las figuras que los objetos. Un plano cerrado, un poco más que el de la foto. No sé si sería mucha licencia ponerlo ahí atado con las cuerdas, que junto al barro ya no daría exactamente la idea de estar secuestrado, quedaría una composición un poco más extraña, porque ¿qué hace un tipo embadurnado en barro y atado a la vez? Y es verdad que gráficamente el barro queda muy marciano y malrollero. Como de mutante de Burns. Ese mismo tono verdoso de la foto es buenísimo. Está la peliculera, la abstracta, la de tortura y el tratamiento exfoliante. Voy meditándolas, a ver qué visualizo».

Dos versiones de la VW Combi. Pincha para ampliar.

Kano: «Las contras molan todas también. La primera, claro, más obvia, la pasarela entrando en el mar da juego, queda mas poético. ¿Descartas usar una de las ideas de portada en la contra? Como la silla con las cuerdas, sin fondo, y la ventana arriba o simplemente la furgoneta con las puertas abiertas, también sin fondo. La furgoneta me pone, ja, ja, ja. En todo caso en la contra podría quedar más guapo poner lo que sea sin fondo; incluso las herramientas colgadas sin corcho ni nada, y el diente puesto abajo también, todo directamente sobre el color de la contra. No sé si la quieres relacionar de alguna manera con la imagen de portada».

La silla vista como elemento de portada o de contraportada.


Una vez recibidos los bocetos de Kano, me puse a hacer pruebas combinando las opciones que más me gustaban con diferentes tratamientos tipográficos (algunas pruebas aparecen pegadas directamente sobre la portada de A la cara porque para entonces ya sabía que Capturado iba a tener el mismo número de páginas y por lo tanto el mismo grosor de lomo). Veamos un par:

Debo reconocer que durante varios días estuve bastante tentado de tirar para adelante con la imagen de la VW Combi, principalmente porque me preocupaba que las otras pudieran resultar demasiado macarras y poco comerciales, que pudieran ahuyentar a un determinado tipo de lectores que de otro modo podrían haberse interesado por un thriller psicológico como este. Pero de haberlo hecho así, creo que en última instancia nos habríamos acabado arrepintiendo, porque si por algo creamos esta colección fue precisamente para disfrutar con nuestro trabajo y para poder permitirnos tomar decisiones que en una editorial «de verdad» quizá no tendrían lugar. Y en este caso, al margen de disquisiciones empresariales, la imagen que más «nos ponía» a todos, tanto a mis socios de Valdemar, como a Kano, como a mí, era la del personaje embarrado enarbolando el pie de cabra. Así pues…

Pincha para ampliar.


Mientras hacíamos varias pruebas con distintos colores y texturas de fondo para la imagen de portada, Kano me envió como alternativa un nuevo reencuadre del dibujo que potenciaba la incertidumbre y el mal rollo, así como el anonimato del personaje:

Una vez decidido el color y el encuadre definitivos, ya sólo quedaba elegir qué elementos iban a ir definitivamente en la contraportada y en la solapa. Había dos opciones bien claras, cada una con sus propias ventajas. La silla, por una parte, ofrecía la posibilidad de colocar el texto de la contra de un modo más original y llamativo, siguiendo en diagonal el contorno de la sombra. También me gustaba mucho la idea de extender la imagen sobre el lomo del libro de tal modo que la sombra lo dividiera en dos, dejando el título y el nombre del autor en la parte morada y el logo y el nombre de la editorial en la parte negra.

Por otra parte, también me atraía la idea de contrastar la imagen cerrada y opresiva de la portada con el plano abierto y aparentemente apacible de la VW Combi en mitad de la playa. Además, nos permitía darle más coherencia cromática al conjunto, reservando las tonalidades más oscuras para las solapas. Para intensificar el efecto, posteriormente le pedí a Kano que cambiara el cielo azul de la playa por un tono verdoso similar al de la portada.

Una vez hecho esto, ya sólo quedaba decidir el tratamiento tipográfico. Para no aburriros con las decenas de pruebas que fui acumulando, aquí sólo pondré dos ejemplos de versiones casi definitivas que cerca estuvieron de convertirse en la portada real. Resulta curioso que después de probar con todo tipo de colores tanto para el título como para el nombre del autor, acabara volviendo a los que llevaba utilizando desde el primer día, a pesar de que en su momento los había puesto completamente al azar, sin meditarlo demasiado.

Pincha para ampliar.


Todavía me sigue gustando mucho la versión de la derecha, con el título en verde. Me parece una opción quizá algo más elegante que la definitiva, pero es innegable que el amarillo resulta mucho más llamativo y potente, así que en última instancia nos decantamos por él. La prueba de la izquierda, con un bloque de un solo color en el lomo, también habría quedado bien, aunque a lo mejor habría resultado excesivamente «clásica», rompiendo la tendencia de las dos cubiertas anteriores de tener un pequeño elemento gráfico no demasiado definido en el lomo que pueda despertar cierta curiosidad o incluso impulsar a un hipotético comprador a sacar el libro de la estantería para ver «qué más hay». Aquí abajo tenéis, finalmente, la versión definitiva (la imagen se amplía al pinchar). Este ha sido sin duda el Cómo se hizo más largo que ha aparecido en el blog hasta ahora y ciertamente espero no haber abusado de vuestra paciencia, pero creo que merecía la pena entrar con cierto detalle en todo el proceso. Espero al menos haber conseguido transmitir en alguna medida lo emocionante que resultó para mí ir descubriendo poco a poco la portada en las sucesivas imágenes que iba creando Kano. Para alguien que, como yo, se pasa tanto tiempo trabajando solo, entrar aunque sólo sea durante un par de semanas en un proceso de colaboración tan intenso como este siempre resulta altamente estimulante.

Otras entradas sobre diseño de portadas

· Un lavado de cara
· El hombre de las portadas de acero
· Schulz, Carlitos y Snoopy: una portada
· Cubriendo los trapos sucios
· Sexo implícito: cómo se hizo la portada de El otro Hollywood
· Creando escuela: Hard Case Crime
· James Bond Recovered
· En portada: John Gall

DestacadosDiseñoLibros , , 13 comentarios

13 comentarios

  1. A mí estos «cómo se hizo» me encantan, si fueran el doble de largos disfrutaría el doble. Muy interesante saber cómo se llega a una portada cuando de verdad hay interés en el producto que se edita. Porque hay editoriales (grandes) que publican unas portadas de vergüenza ajena, cuando una pequeña como Es Pop/Valdemar trabaja cada pequeño detalle para que el resultado final sea a la vez estético, coherente con el libro e impactante. Un diez.

  2. Estoy con Tío Berni, a mi también me encantan estas entradas donde nos cuentas ¨lo que hay detrás de una portada-lo que no se ve de una editorial¨, y si es mas larga pues mejor. El detalle de la WW T1 es fantástico, y si dices que sale en la novela pues ya es demasiado, me encantan esos cacharros. Sabia que Es Pop hacia la cosas con cariño, ahora no me cabe la menor duda! A ver si sale ya!

  3. Genial el post. Me veo reflejado en esas «especificaciones» y en la libertad con la que el ilustrador las traduce, esa es la idea.

    Es genial encontrar verdadero contenido en internet. Contenido con forma y con alma.

    Gracias por compartir!

    Saludos desde el Molino

    Eduardo

  4. Siempre es interesante ver el proceso que se esconde tras una ilustración, especialmente si es la portada de un libro, por que normalmente piensas que surgen de una idea genial, venida de la nada, y no en todo lo que hay detrás, el bombardeo de ideas, la prueba y el error, decidir lo que está mal y afinar lo que está bien.

    A pesar de que me encanta la portada tal y como está, la silla es sin lugar a dudas la imagen más potente de esta entrada, menos mal que no se perdió en el proceso.

  5. Muy buen post, y si me lo permites hay va una sugerencia para un futuro título de la colección: ‘King Suckerman’. En esta novela George Pellecanos hace su propio ‘Pulp Fiction’ mezclando pelis blackspotaition, musica de los ’70, drogas y dos protagonistas de lo mejorcito que ha escrito. Desconozco si está publicada en castellano, pero si no es así, ¿alguna posiblidad de verla editada por aquí? Gracisa.

  6. Muchas gracias a todos por los comentarios. Padawan: es verdad que la imagen de la silla es tremenda. En realidad creo que cualquiera de las tres ilustraciones podría haber funcionado perfectamente como portada, pero por desgracia había que quedarse con una sola.

    Sergio: Aquí en esta casa somos superfans de Pelecanos. King Suckerman sigue inédita en castellano, pero por ahora la agencia que gestiona los derechos prefiere seguir esperando a ver si Ediciones B se anima a sacarla antes que venderle los derechos a otra editorial (ellos pagan anticipos bastante más elevados que los nuestros, claro). Seguiremos atentos.

  7. Vaya, yo también había pensado en Pellecanos. Tus entradas sobre él son muy buenas. Es una pena que Ediciones B lo tenga muerto de risa. A ver si los derechos caducan y tenéis oportunidad de editarlo en esta casa que estoy seguro de que lo vais a cuidar muchísimo más y mejor.

    A mi me encanta «The Wire» y por eso tengo curiosidad por ver lo que escribe Pellecanos, curiosidad hostigada por tu entrada por cierto, pero al margen de Pellecanos y si se permite hacer una sugerencia, ¿Habéis pensado en tantear la publicación de libros de otros de los implicados en la serie? Tengo entendido que David Simon también tiene un par de libros interesantes.

    Ya llega el verano y tengo «Acero» y «Capturado» apilados en lo más alto de las lecturas pendientes. A ver que nueva sorpresa nos espera tras el verano :-)

  8. ¿Alguna novedad sobre el libro de Slash? ¡Que me estoy quedando sin uñas de tanto morderlas!

    :)

  9. Nicastro: lo único que puedo decirte es que llevo ya 300 páginas traducidas y que me quedan otras 150. Ahora que ya hemos lanzado bien lanzada la colección de narrativa espero poder acabarlas entre junio y julio para editarlo finalmente a la vuelta del verano. Sé que se está retrasando mucho y de verdad que siento la espera, pero había que poner esto otro en marcha. Un saludo y gracias por tu paciencia.

  10. ¿Cuándo podré comprar Capturado a través de la tienda on line de es pop? He leído los primeros fragmentos en pdf, y estoy gratamente sorprendido (mai de la vida había escuchado hablar de este escritor, y teniendo en cuenta que trabajo sobre Patricia Highsmith, mi sorpresa fue mayor, y más agradable).

    estoy deseando tenerlo en mis manos, abrirlo con cuidado, olerlo, ojearlo, leerlo. Y luego reseñarlo.

    Saludos cordiales y enhorabuena.

  11. Benjamín: Precisamente a partir de mañana estará disponible en la web. Un saludo.

  12. Muy interesante el post. Esta parte «visual» de los libros es la que menos se suele tener encuenta, y me parece fundamental. Coincido con lo dicho aquí: las tres imágenes que barajásteis eran muy potentes, y cada una habría quedado de fábula… pero la imagen de la silla a mí me parece quizás un poco más vista, más conocida. La del tipo manchado de barro, aunque quizás no capture tan bien la esencia de la novela, es muy muy potente y no pasa desapercibida.
    El libro me lo acabo de leer (y mini-reseñar en mi blog): es un thriller buenísimo. Por una vez la publicidad no engaña: me gusta Patricia Highsmith y este libro me ha encantado. Muy muy bueno.
    Enhorabuena, Óscar, lo estás haciendo de puta madre.
    ¿Y qué pasa con ese otro libro de Cross, Enterrada, que aparece en la solapa con título en castellano pero no está editado? ¿Será una de tus próximas novedades? Di que sí y me harás muy feliz.
    Un saludo

  13. Muchas gracias por la reseña, Toni, me alegro de que te haya gustado el libro. En cuanto a Enterrada… ejem, aún no puedo decir nada, pero espero poder darte una alegría en un futuro cercano. Mientras tanto, como tú mismo comentabas en tu blog, puedes quitarte un poco el mono con Luther, que si bien no me parece ni mucho menos una obra maestra, sí que me parece una serie muy entretenida y, por momentos, realmente turbadora. El primer episodio es un poco fórmula, pero es importante para establecer las relaciones entre personajes. Y los que van del 3 al 5 son de una intensidad de la leche. Yo creo que te va a gustar.
    Un saludo.

Deja tu comentario

Debes entrar para poder comentar.

Ser ignorado es un gran privilegio.
Saul Leiter
Popsy